La familia de "Ras", un perro desaparecido, impulsa una iniciativa popular para que se apruebe en Cataluña una normativa que obligue a los servicios públicos a comunicar la defunción de un animal de compañía cuando lo encuentren sin vida. Se trata de acabar con la "muerte anónima" de miles de perros y gatos. Este procedimiento ya se ha instaurado en Madrid, aunque con disfunciones, y el próximo mes de enero entrará en vigor en Galicia.

La obligatoriedad de la identificación de los animales de compañía en Cataluña se aprobó en 1994. Sin embargo, no se reguló la obligación de exigir la comprobación de la identificación de los animales muertos en carreteras y vías públicas.

Diversas entidades han sido entrevistadas en la redacción de esta noticia, entre ellas ADDA que propone: "contar con un registro donde los datos estuvieran centralizados, ahorraría el dolor de muchas familias que ignoran si su animal de comapañía sigue vivo o no y, también, permitiría tener registro de los abandonadores y así poder sancionarlos". Asimismo ha manifestado, que debería haber una ley estatal que homologue y que establezca una base estable y rigurosa. Hay desajustes tremendos entre comunidades.

Fuente de información: La Vanguardia

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